¿cuantas veces se debe bañar a un perro?
El baño debe ser una experiencia entretenida y que fortalece los lazos afectivos y la jerarquía entre tú y tu mejor amigo. Sigue estos pasos para tener un baño exitoso:
- Elige el champú adecuado
Con qué frecuencia
Contenidos
Como ya mencionó antes, la frecuencia siempre el éxito del animal. Yo recomiendo bañar a un perro cada 15 días para ayudar así a nutrir tanto el pelo como la piel. Baña a tu perro siempre que lo necesites porque no pasa absolutamente nada.
Bañar tiene un perro es bueno. Es cierto que no tienen el mismo PH que nosotros, pero sí que es necesario bañarse de una manera más continuada. Actualmente tenemos una montaña de contaminación que surge en el pelo y la piel del perro y puede causar problemas. Con un buen baño retiramos cualquier tipo de contaminación en el animal.
Cuando lavar a perro dependiendo del tipo de pelo que tenga
Aunque obviamente existen muchos otros factores que nos indican cuando debemos bañar a nuestro perro, cómo la suciedad o el olor, a niveles generales podemos indicar que dependiendo también del tipo de pelo que tenga será necesario bañarlo con mayor o menor frecuencia.
Los perros de pelo grandes y abundantes tienen a mancharse mucho más que los perros de pelo corto y poco espeso, sencillamente porque la suciedad se adhiere más y cuesta más que se prenda.
Cuando no debes bañar a tu perro
Hay determinadas situaciones en las que no debes bañar a tu perro. Por ejemplo, cuando creas que pueda tener moquillo o cualquier otra fermedad. Antes de meterlo en el agua, levalo al veterinario. Este te dirá si efectivamente está enfermo y cuál será el mejor modo para ponerle remedio. Aprovecha para preguntarle cuánto tienes de esperar para bañar a tu mascota terminada la medicación o el periodo de convalecencia. De lo contrario, puedes empeorar su salud.
El baño altera el pH del perro
Junto a esta aseveración también habrás escuchado decir que el baño altera el pH del perro. Y¡sí, es completamente cierto! Pero de la misma manera que nos succede a los humanos, con una salvación desconocida: el pH de un perro se altera, incluso, por metere en un río o mojarse con la lluvia. Algo que, lejos de ser dramático, es solo una cuestión de poco tiempo hasta que vuelve a equilibrarse y no es ni irreversible ni peligroso para el perro.
Y dejamos para el final uno de los mitos más singulares: no conviene bañar mucho al perro porque los otros perros no le reconocerán con el perfume del champú. Algo que nada tiene de científico, ya que el olfato del perro es tan potente que no hay aroma que pueda enturbiar el auténtico olor de un animal. ¡Ni poniéndole colonia canina!